América Latina ha sufrido más de 2,5 millones de asesinatos desde el comienzo de este siglo y se enfrenta ahora a una grave crisis de seguridad pública que requiere soluciones urgentes e innovadoras. Esto es lo que advierte un nuevo informe que acaba de ser publicado.
"Las dimensiones totales de la violencia homicida son impresionantes", dice el informe del Instituto Igarapé, un think tank de Brasil que se centra en asuntos de seguridad y desarrollo. La publicación, que vio la luz este jueves, muestra un retrato sombrío de lo que llama el continente más homicida del mundo.
América Latina sufre el 33% de los homicidios de todo el mundo a pesar de tener solamente el 8% de su población. Una cuarta parte de los homicidios que se producen en todo el mundo se concentran en cuatro países –Brasil, Colombia, México y Venezuela– y todos ellos se están preparando para elecciones presidenciales, en las que uno de los grandes temas va a ser el de la seguridad.
Acceder al informe completo Citizen security in Latin America: Facts and Figures
Según el diario Granma, órgano oficial del Partido Comunista de Cuba y único medio de prensa escrita que se imprime en el país, el nuevo Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel, explicó en su discurso de toma de posesión “las posturas de continuidad del gobierno que encabezará, en especial en cuanto a la relación con el pueblo, las relaciones internacionales y el liderazgo del Partido, al frente del cual continúa el General de Ejército Raúl Castro Ruz”.
En su alocución, el nuevo presidente se decantó por la retórica propia del régimen, una práctica en la que la propaganda siempre ha primado sobre el análisis razonable. Solo los hermanos Castro se han permitido alguna valoración crítica en contadas ocasiones, pero en cualquier caso nunca incluyeron reflexión alguna relativa a errores o insuficiencias propias, sino que los déficits siempre fueron o de otros o difusamente colectivos.
En un discurso de 2008, Raúl Castro reconoció la contracción que padecía la manufactura cubana, así como la necesidad de producir por lo menos para alimentarse. El presidente, que había substituido por enfermedad a su hermano Fidel dos años atrás...