domingo, 4 de diciembre de 2016

Epidemia de terror urbano en América Latina


El País (04.12.2016): La tasa de criminalidad crece en las ciudades de América Latina, pese al dinamismo que ha experimentado la región. Drogas, armas y falta de expectativas forman parte de la ecuació.

El área registra una de las mayores tasas delictivas del mundo. Más de un millón de asesinatos entre 2000 y 2010. En 11 de sus 18 países, los homicidios tienen estatus de epidemia, es decir, superan los 10 casos por cada 100.000 habitantes. Hay ciudades como Caracas, Acapulco, San Pedro Sula o San Salvador donde este índice es 10 veces mayor. Ahí no se trata de una epidemia, sino de puro terror.

Pero en este territorio no todo ha ido mal. Por el contrario, Latinoamérica experimentó en la década pasada uno de los mayores desarrollos económicos de su historia. El desempleo descendió de forma sostenida, 70 millones de ciudadanos salieron de la pobreza y el crecimiento agregado fue del 4,2% anual. Un sueño para cualquier economista. No para un policía. Con la bonanza, la criminalidad también aumentó. Homicidios y robos alcanzaron tasas delirantes. La bienintencionada correlación (menos pobreza-menos delito) encalló. La inseguridad demostró tener una genética más compleja. Detrás del delito latían fuerzas poco estudiadas.